Esta novela del género Ciberpunk, la leí por primera vez en el año 2007, cuando ya había cumplido quince años y me pareció lo más moderno que hasta entonces había podido leer. Para quienes vivimos inmersos en el mundillo informático, inmediatamente nos vimos atrapados por la fresca narrativa, la anticipación técnica y el sarcástico humor que destila en cada página la novela de Neal Stephenson.
Siempre me dije que cuando hicieran la película, sería lo más novedoso que se hubiese hecho desde la Naranja Mecánica, sin embargo apareció antes “Matrix”, e incluso más recientemente “Ready player one” que viene a ser un “homenaje”, (eufemismo para decir plagio), con skin ochentero, de Snow Crash.
El futuro es sombrío y dominado por las corporaciones. Los hackers, son una de las profesiones más comunes y peor pagadas. Estos pobres bichos, la pasan tan mal que reparten pizza para poder ir llegando a fin de mes. La mafia es una de las últimas instituciones respetables que van quedando en el mundo. Pero esto solo es una parte pequeña de la trama, hay virus informáticos, referencias babilónicas, teorías conspirativas, chicas inverosímiles y un héroe protagonista con un nombre impensable.
Lo irónico es que el “futuro” presentado por la novela no está muy lejos, cada día que pasa lo vemos a la vuelta de la esquina:
(Atención si la piensan leer no vean todo lo que sigue)
A manera de resumen:
Las teorías de Von Misses han sido llevadas al extremo, los gobiernos ya no tienen ningun poder ni valor representativo de nada, todo lo domina el grupo de grandes franquicias económicas que han parcelado practicamente todo el mundo y la gente simplemente decide en que parte vivirá y pagará por su seguridad privada, sus servicios básicos privados.
Ya no existen leyes, en el sentido de que no hay un organismo legal que rija la moral y costumbres, todo se basa en códigos de ética de las diversas corporaciones entre los que los de la Mafia que resultan ser los mas coherentes, conservadores y respetables que el de los demás grupos “corporativos”.
La gente vive hasta en contenedores de basura, llevando existencias al borde de la indigencia o tocando la miseria real, pero para subsanar y olvidar esa dura realidad, llevan unas vidas paralelas en el Metaverso que es un universo virtual en donde aún los hackers convertidos en repartidores de pizza, pueden ser alguien importante o por lo menos popular. Y sí, Stephenson usó la palabra “Metaverso” antes de que Zuckerberg la arruinara con gafas de realidad virtual y una vibra de funeral. Este metaverso me recuerda el viejo juego MMORPG llamado “Runescape” en el cual cada quien es un personaje que luce un Avatar (apariencia) y convive con otros miles de jóvenes que se conectan simultaneamente a vivir aventuras de caballeros, brujos, combates. Aprenden a “Minar” para obtener metales, a fundirlos y hacer armaduras o espadas que luego venden para obtener lo que necesitan.
En el metaverso, este mundito es llevado al extremo, llegando a comprar propiedades y parcelas virtuales, todos se conectan al Metaverso. Recordemos que fue escrita entre 1986 y 1991, siendo publicada en 1992 y en ese año es que estaban apareciendo los primeros juegos MMORPG en línea.
La tecnología informática de los virus alcanza una diferente y escalofriante dimensión entre lo biológico y lo virtual. Todo esto al mezclarse con la teoría de los lenguajes primarios sumerios y los mitos de la creación, sumado a la leyenda de la torre de Babel y otros “disparates” mas que simplemente enriquecen la novela con una gran dosis de suspenso y emoción, asi como de misterios ocultos y esotéricos. De seguro la novela tendrá una pequeña pero incondicional colección de fanáticos al estilo Código Da Vinci, que creen realidad toda esa sarta de teorías. Pero estos detalles ciber tecnológicos son los que hacen de la novela algo digno de ser saboreado en toda su extensión. Por otro lado los héroes de Hoy es decir los “Hackers” no son la gran cosa en ese momento ya que resultan ser la raza mas común y extendida de seres humanos y por lo tanto la mas vulnerable al mal.

El héroe protagonista se llama precisamente “Hiro Protagonist” lo que resulta una sarcástica humorada, sobre todo porque ademas de ser un héroe atípico, resulta una mezcla racial entre negro y japones, algo tan poco frecuente que en una escena de la novela, Hiro, es asediado por unos fanáticos racistas:
O en otra escena, cuando Hiro despues de haber decapitado a un neosudafricano con su Katana, Stephenson añade: “La visión de una Katana desnuda inspira en todo el mundo un nivel de cortesía prácticamente japonés.”
Viendo en retrospectiva, años después, “Hiro” sería el nombre de uno de los personajes de aquella buena pero malograda serie “Heroes”.
La jovencísima e inverosimil heroína co protagonista (llamada T.A. [se pronuncia TIA]) hace ver como a una anciana decrépita y artrítica a la Trinity de la antológica película The Matrix, algo asi como a la apacible abuela Sara García en sus últimos filmes y telenovelas, pero vestida de cuero negro (¿Recuerdan Mundo de Juguete?).
Realmente la pequeña T.A. resulta ser el personaje mas explosivo de los ultimos tiempos. Quizá la versíón más moderna de ella es Lift, la pequeña danzante del filo de la saga del “Archivo de las tormentas” de Sanderson.
La trama es la de siempre. HAY QUE SALVAR AL MUNDO DE LOS MALOS, Pero la frontera que delimita al bien del mal no está muy bien marcada e igual hubierra tenido cualquier otro final sin que el “actual” estado de cosas cambiase mucho.
Hay un virus, pero es un virus informático/lingüístico que afecta tanto al cerebro como al metaverso.
Los malos a veces no son tan malos ni los buenos tan buenos, en fin la novela es un verdadero huracán de acción, una burla a nuestra sociedad cada vez mas mercantilizada y corrompida.
Personalmente me gustó muchísimo el final, casi al punto de que que la novela debería llamase “Un día en la vida moderna de T.A.”
¿Que mensaje nos deja?
En mi humilde opinión no nos deja ningún puto mensaje, la novela no es mas que pura entretención tecnológica disparada a nuestros sentidos y mente, los entendidos hablarán de la sutil crítica a la tecnificación de la sociedad y a la tendencia Von MIsseniana que llevan los gobiernos en manos de las grandes corporaciones a hacer desaparecer al estado, asi como la inversión de valores de la juventud y demas sabihondeces de esas.
Lo que sí me queda claro es que luego de leer la novela por el momento solo veo “Snow Crash” en cualquier otro libro.
Si hubieran hecho la película en los años noventas este sería el guión del Trailer:
EN UN MUNDO…
donde la pizza se entrega en menos de 30 minutos o mueres intentándolo…
UN HOMBRE…
con katana en mano, gafas de sol en interiores, hacker de nivel y un nombre tan sutil como una explosión nuclear…

HIRO PROTAGONIST
(no estamos bromeando, se llama Hiro protagonist)
es un Hacker que para ganar dinero, reparte pizza en modo freelance para la Mafia, todo un Lord en el Metaverso, y espadachín samurái cyberpunk a tiempo parcial.
Pero cuando un nuevo virus digital llamado Snow Crash empieza a freír cerebros tanto dentro como fuera del Metaverso (ese internet 3D con avatares antes de que fuera cool o triste), Hiro tendrá que descifrar una conspiración que involucra:

Lenguas muertas sumerias,
La Mafia, como una institución respetable,
Un hacker afroasiático, culto que parece salido de un episodio raro de Ancient Aliens,
Países y sus fronteras convertidas en McFranquicias,
Y una explosiva adolescente con un monopatín nuclear que puede rebotar sobre los coches en marcha como si viviera en Tony Hawk’s Apocalyptic Pro Skater.

DE LOS AUTORES DE “NADIE TE VA A EXPLICAR LO QUE ES LA INFORMÁTICA BÍBLICA” Y “CÓMO HACER SATIRA DEL CAPITALISMO CON ESPADAS”…
viene la historia de un hombre, un virus, y un montón de cosas que probablemente no deberías entender sin una licenciatura en semiótica, física cuántica y fast food management.
SNOW CRASH
Esta vez, el error del sistema es la humanidad.
Narrado por la voz interior que ya ha perdido la fe en que entiendas qué está pasando. Coming soon a una neurona dispuesta a rendirse.